Con este reto aprenderás a mantenerla resplandeciente, te ayudará a deshacerte de los enseres u objetos que no necesitas y crearás un espacio más armonioso.
Una casa ordenada es un lugar más feliz en el que podemos desconectar. Por eso es tan importante encontrar la mejor forma de conseguirlo. No es raro sentirnos agobiados, no saber por dónde comenzar o, peor todavía, empezar sin un plan establecido y en mitad del proceso darnos cuenta de que estamos atascados. Por ello te proponemos este reto, muy fácil y eficaz.
Hay muchas técnicas de orden y limpieza, una de las más famosas la de Marie Kondo, pero también otras establecidas por hábitos de tu familia o tuyas propias. Pero en este artículo nos centramos en la técnica de Alicia Iglesias, organizadora profesional y responsable del blog ‘Orden y limpieza en casa’.
¿Porqué 21 días? Se suele considerar es el tiempo mínimo que se necesita para generar un hábito, aunque existen numerosas teorías a favor y en contra de este mito, sin embargo, estos son los días que la creadora de este reto considera necesarios para poner nuestra casa a punto. ¿Es porque así nos dará tiempo a crear ese ansiado hábito? Puede ser, pero lo cierto es que son 21 días porque ella propone que nos tomemos las cosas con calma y vayamos poco a poco, sin prisa, pero sin pausa.
El reto de los 21 días, no deja rincón sin revisar.
El día 1 comienza fuerte, porque propone sentarnos con calma y planificar un menú mensual. Esto resulta muy práctico para quitarnos esa preocupación y tiempo de pensar qué vamos a comer.
Puedes empezar planificando de lunes a viernes y dejar el fin de semana libre. Esto ayuda a que el día a día sea más sencillo y aproveches también el tiempo y presupuesto de la compra.
El segundo día no es menos interesante, es el momento de organizar la despensa y el frigorífico. Para ello lo mejor es vaciar por completo los armarios y limpiarlos en profundidad con un poco de agua y amoniaco. Tirar los productos estropeados o pasados de fecha y ordenarlos por tipos de producto para ser conscientes realmente de lo que tenemos en la despensa.
Vamos llegando poco a poco al día 3, que nos invita, sin salir de la cocina, a ordenar armarios y cajones. Como sucedía en el punto anterior, el primer paso es sacarlo todo, limpiar bien el interior y, después, pensar en cómo lo vamos a organizar todo: lo mejor es que las cosas estén guardadas cerca de donde se usan. Tira o dona todo lo que no usas, tendemos a acumular herramientas y utensilios y, a la hora de la verdad, no los necesitamos. Aprovecha para despejar la encimera, cuantos más trastos tenga encima, más incómoda será de limpiar.
Sin salir de este espacio, el día 4 lo dedicaremos a limpiar la cocina a fondo. Con un spray de vinagre y un bote de bicarbonato, es lo que recomienda Alicia. Con estos productos evitarás también acumular botes de limpieza que no necesitas. Una idea de ordenar dentro de los armarios es usar bandejas o divisiones con cajones.
Pues ya hay una zona de la casa mega ordenada, ahora vamos avanzando a los días 5 y 6 que los destinaremos al baño. Primero eliminaremos botes que no usamos y colocaremos de forma organizada todo lo que hemos decidido quedarnos; y al día siguiente para limpiar en profundidad: WC, bañera o ducha y terminando con los lavabos, espejos y grifería.
La entrada, recibidor o pasillo será el protagonista el día 7, donde lo mejor es tener unos colgadores para dejar los abrigos nada más entrar y algunas soluciones estrechas de almacenamiento.
Los días del 8 al 10 están centrados en los armarios, ropa y complementos. Primero diseñar el orden, comprar o pensar cómo poner la ropa en cajones, bolsas o perchas. Que no se te olvide donar o tirar en el reciclaje aquella ropa que ya no uses o esté pasada de moda.
El día 11 lo puedes destinar a los zapatos. Lo haremos de igual forma, tiraremos o donaremos aquellos que no usamos y el resto lo ordenaremos con criterio: deporte, día a día o solo para ocasiones especiales. Y el último día, el 12, dedicado a los armarios, lo haremos a los complementos: bolsos, cinturones, pañuelos, gorros o bufandas.
A partir de este momentos los días restantes van dedicados a una parte de la casa. Ordenar, tirar y limpiar en profundidad cada una de las zonas. Día 13 para organizar y ordenar el salón comedor, y el 14 para el dormitorio principal. Si tu casa tiene más dormitorios seguiremos ordenándolos el día 15 y el 16. El despacho o estudio lo dejaremos para el día 17 y el garaje, trastero o altillo, para el 18.
Ya tienes la casa ordenada y limpia, pero ahora toca mantenerla, por eso Alicia propone que el día 19 lo dediquemos a planificar las rutinas de limpieza. ¿Cada cuánto tiempo limpiaré los armarios por arriba? ¿Cómo hago para no acumular productos innecesarios? Etc.
El día 20 lo dedicaremos a las rutinas de orden. Asegúrate de que las cosas nuevas que entran en casa cumplen con los criterios que estableciste para deshacerte de las viejas, mantén al día el papeleo, ordena al momento lo que se desordene… De esta forma se llega al día 21, donde recomienda tomar consciencia del trabajo hecho y disfrutar. Son cambios grandes que hay que mantener, pero sin agobios, porque lo importante es estar a gusto en casa.
Convertir tu hogar en un lugar agradable y confortable para ti y tu familia no conlleva tanto tiempo y es fácil de hacer, solo necesitas 21 días. No es necesario realizarlo seguido, puedes ir haciéndolo los fines de semana o en días salteados, lo importante es seguir un orden y cumplir con las tareas que requiere cada espacio.
Puedes guardarte la imagen ordenada en cuadrículas e ir tachando en notas conforme vayas cumpliendo los objetivos.
Si necesitabas un impulso para tomarte en serio el orden de casa, es éste.